Este viernes el dirigente opositor Ismael García denunció que en el cementerio El Junquito, en el Municipio Libertador de Caracas, entierran «indignamente» a los fallecidos por Covid-19 en fosas comunes.
García destacó además que en este campo santo, se realizan entierros de forma masiva y clandestina.
Igualmente, el portal albertonews.com asegura que a los familiares les entregan una caja con supuestas cenizas para que no reclamen los cadáveres.
«En cada fosa, que están construidas para dos, arrojan hasta 15 cuerpos envueltos en bolsas. Cuando manden a investigar y las manden a abrir, se van a conseguir con ese holocausto del siglo 21», recalcó el parlamentario.
Esto ocurre, a pesar de que en marzo pasado el Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Semanecf) emitió un comunicado que se entregó a todo el personal de las morgues venezolanas.
De acuerdo al ‘Protocolo en el Manejo de Cadáveres de casos positivos y sospechosos de COVID-19’, «el destino de los fallecidos por esta causa puede ser entierro o incineración en las condiciones habituales. Con el cuidado pertinente, las cenizas pueden manipularse sin que suponga ningún riesgo alguno», publica talcualdigital.com.
Entierran a fallecidos por Covid-19 en fosas comunes
No obstante, el pasado 16 de marzo el mismo organismo informó, a través de un tuit que luego se eliminó, que por instrucciones del Ministerio de Interior, Justicia y Paz, «las personas que mueran a causa de la COVID-19 se llevarán directo a las fosas del Cementerio General del Sur en La Peste».
Asimismo, indicaba que hasta que no culmine la etapa de contingencia en el país por la presencia de este virus quedaban suspendidas las cremaciones, reitera la web.
Entre tanto, Ismael García detalló que en cementerio de El Junquito, «en el espacio de dimensiones reducidas tienen a por lo menos 1.100 personas fallecidas enterradas de manera informal, sin que los familiares sepan».
«Lo terrible consiste en la mentira del Gobierno Nacional. Estos entierros masivos se han dado en muchos países, pero de manera digna, con responsabilidad a las familias y con los protocolos adecuados, incluso realizan incineración masiva», criticó.
El político y sindicalista venezolano advierte que, de continuar con esta situación, podría provocar otra pandemia; «puesto que los olores que proliferan resultan impresionantes y muchos habitantes de El Junquito se vieron obligados a irse de la zona».
En tal sentido exhorta a las ONG de DDHH y a los organismos internacionales para que verifiquen las condiciones en el lugar.
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