La Policía de Portugal finalizó, este jueves 25 de mayo, el operativo realizado en el Algarve para buscar los restos de la niña desaparecida de Madeleine McCann y dar nuevos indicios del caso. En la búsqueda de nuevas pistas participaron efectivos alemanes y británicos.
La jornada duró tres días más de lo previsto por las autoridades, debido a las fuertes lluvias acaecidas en el embalse de Arade que se suspendió los trabajos el pasado martes.
Es de recordar que, la niña británica desapareció hace 16 años en Barragem do Arade, el “pequeño paraíso” del presunto asesino de Madeleine.
Hasta ahora, se desconoce si el operativo ha tenido algún resultado significativo para el caso. Por los momentos, no está prevista ninguna comunicación oficial por parte de la Policía.
El equipo de búsqueda uso maquinaria pesada, perros, georradares y drones; logrando recopilar material almacenado en bolsas para su análisis; los cuales serán procesados en Alemania.
La investigación se centró en un área muy acotada de las orillas del embalse; allí, los oficiales cortaron árboles para excavar el terreno.
Para los expertos en medicina forense, los avances tecnológicos de los últimos años pueden dar nuevas pistas para resolver el caso, si hay evidencias sobre la desaparición de la niña.
Madeleine solo tenía tres años cuando desapareció el pasado 3 de mayo de 2007; de la habitación donde dormía con sus hermanos pequeños en un complejo turístico de Praia da Luz.
En el 2020, la investigación da un giro inesperado y el alemán Christian Brueckner se convirtió en el principal sospechoso; de hecho está preso por otros delitos.
De hecho, la Fiscalía alemana de Braunschweig presentó la teoría de que Madeleine murió a manos de Brueckner; quien cuenta con un amplio historial de crímenes por abusos sexuales y pederastia, algunos de ellos en Portugal.
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