Su mente se ha desarrollado con un síndrome hipermnésico, una capacidad superior que le permite almacenar y memorizar, tal como una memoria USB, más de 7 mil archivos en formato “indestructible”, los cuales se transportan por casi todo el estado Carabobo con un solo propósito: recibir aplausos de 64 megabytes.
Aunque no esconde ningún título universitario bajo el brazo, ya que sólo alcanzó graduarse como Bachiller, su fluidez para expresarse sorprende a más de uno. “Lo que pasa es que soy una persona que lee mucho y el que lee, se instruye, se nutre y siempre carga el cerebro activo. Yo no leo por leer, yo analizo (…) Llevo unos 4 mil libros”, recalcó.
Este personaje es oriundo de San Cristóbal, pero hace 21 años decidió conectarse con el gentilicio valenciano por necesidad, “tenía que buscar la mejor manera de producir”, confesó. Y desde entonces, ha logrado mantener con el arte y algunos trabajitos de albañilería por ejemplo, a su esposa Carmen y sus 4 hijos.
“Yo domino el área”
El miedo escénico no es una limitante para él, sin embargo debe enfrentarse a personas con “caracteres diferentes” que quizás no valoran su particular talento. “He logrado dominar cualquier problema, con educación siempre (…) Tenemos que ser caballeros, y más cuando somos talento nacional urbano”, comentó este señor de 50 años.
Así que en resumidas cuentas, no hay dificultad alguna que lo obligue a dejar las calles, y por ende resaltó: “Lo que más me gusta es que hay receptividad, la gente me apoya, se ríe, la gente explota… Pero de la risa, la gente me aplaude, entonces son muchos mecanismos unidos en uno solo. Ya eso es una ventaja para mí”.
“Y por si fuera poco”
Los puntos estratégicos que recorre a pie desde las 7:00 de la noche hasta la 1:00 de la madrugada son las populosas “calles del hambre” de varios municipios de la ciudad, pasando por Las Quintas de Naguanagua, Mañongo, El Trigal, El Viñedo, y culminando en la Torre Banaven de Valencia, además de San Diego y La Isabelica.
Una vez allí se dispone conquistar el corazón de los asistentes con alguna de las 7.214 canciones de su repertorio, las cuales escuchó sólo 2 veces para que su memoria prodigiosa las almacenera. Y estos son algunos de los géneros que es capaz de interpretar: “Sandungeo, reggaetón, champeta, bachata, merengue house, vallenato malandro, salsa láser, hip hop,, rap, mambo jambo, y por si fuera poco, changa electrónica y efectos especiales”.
La verdad es que ya muchos los conocen, y hasta lo saludan como toda una personalidad famosa, cosa que lo enorgullece, pero por si quedan dudas, Antonio Vielma nunca olvida presentarse: “Mi nombre es ‘The Black Eyed Peas Venezolano’ pero mi apellido artístico es ‘El Pendrive Humano’”.
Redacción: Raquel Almérida / Noticias24 Carabobo