El plátano es un ingrediente excepcional para enriquecer cualquier comida o postre, en esta oportunidad, será la pieza clave para un delicioso bizcocho.
Con esta receta, tendrás un resultado húmedo y jugoso, con la buena noticia que no contiene lactosa, porque se prepara con leche de soja.
Bizcocho húmedo de plátano, ingredientes
- 3 plátanos maduros
- ½ cucharaditas de canela en polvo
- 200 gramos de harina
- ½ sobres de levadura
- 4 cucharadas de miel
- 125 mililitros de aceite de girasol
- 100 mililitros de leche de soja
- 2 huevos
- 80 gramos de avellanas picadas
Preparación
Pela los plátanos, retírales las hebras y córtalos en trozos. Calienta 1 cucharada de aceite en una sartén; agrégalos y rehógalos durante un par de minutos.
Aromatiza con la canela y remueve para que se impregnen por igual. Prosigue la cocción durante 2 minutos más y apaga el fuego.
Pasa los plátanos a un plato y aplástalos con un tenedor hasta obtener un puré.
Casca los huevos en un cuenco grande. Bátelos y agrega la leche de soja y 2 cucharadas de miel. Incorpora el resto del aceite y sigue batiendo con las varillas manuales hasta obtener una preparación cremosa y homogénea.
Agrega la harina tamizada con la levadura, poco a poco y mezclando continuamente.
Sigue removiendo con una espátula hasta que no quede ningún grumo, e incorpora el puré de plátano.
Paso a paso para el bizcocho de plátano
Precalienta el horno a 180º. Forra un molde alargado de plumcake con una hoja de papel sulfurizado y vierte en él la masa llenándolo solo hasta la mitad de su altura porque el bizcocho aumentará de volumen con la cocción.
Hornéalo durante 45 minutos. Pincha el centro con un palillo. Si sale limpio, retira el bizcocho del horno; si no, prosigue la cocción unos minutos más. Déjalo templar y desmóldalo tirando del papel.
Retira el papel, pasa el bizcocho a una fuente y pincela la superficie con miel. Espolvoréalo con las avellanas y riégalo con unos hilos de miel.
Deja reposar el bizcocho durante 1 hora, hasta que se enfríe y las avellanas se hayan adherido a la superficie.
