En América Latina existen solo dos canales de animales de televisión que transmiten la vida de las especies en su hábitat natural. Como se reproducen, que comen, como viven e infinidades de asuntos de estos que muestran la vida de las especies.
Pero realmente muchas personas no están de acuerdo en los programas que están llevando a través de las pantallas. No estamos de acuerdo con los presentadores de programas en los Canales de animales que intervienen en la vida de estos y los molestan.
Colocan en peligro su vida y hasta la de las especies. Nos vamos a la historia y encontramos aquellos extraordinarios documentales del mundo animal; donde mostraban el escenario sin intervención de una persona.
Pero estos programas han cambiado y no son lo que antes mostraban; luego de la aparición de Stephen Robert Irwin mejor conocido como El Cazador de Cocodrilos. Estos programas han cambiado y no son ni la sombra de lo que eran antes.
Canales de animales y lo que hacen ahora
Ahora se arriesgan y molestan de verdad a las especies, lo molestan en su hábitat; le tocan su cueva para que salga mientras el animal está en su territorio. Sobre todo con las serpientes hemos visto a muchos programas e infinidad de presentadores que mueven las hojas.
No solo es un programa en Animal Planet o Wild hay muchos programas que ahora interfieren en la vida de las especies. Muchas personas han alzado su voz en su contra. Repetimos, una cosa es el documental de una especie y otra es tocarlos, buscarlos y molestarlos.
Ya basta de verdad que tantos presentadores de manera arriesgada hoy quieran ganar rating mostrando como una serpiente es venenosa. Además muchos de estos no tienen conocimiento de materia ofídica ni sabrían como tratarse en caso de ser atacados.
De paso dan un mal ejemplo a las personas sobre todo a los niños y jóvenes que en caso de encontrarse una de estas especies. Estos programa de animales muestran un trato que no se le debe dar.
Lo han hecho con los elefantes no solo les basta mostrarlos en su hábitat; y en un charco de agua, ¡no! Van y los tocan, los molestan e interfieren entre ellos. El mundo de las especies debe seguir siendo salvaje.
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