Un nuevo estudio plantea la relación entre la dieta y la salud de la piel. La dermatóloga de Aiken, Carolina del Sur, Lauren Ploch, destacó la importancia de la alimentación en la salud de la piel. Los nutrientes en los alimentos, como la proteína y antioxidantes, desempeñan un papel fundamental en la salud cutánea.
Aunque ciertos problemas de piel pueden relacionarse con deficiencias nutricionales, son poco comunes en EE. UU. Ploch explicó que una dieta rica en frutas, verduras y alimentos ricos en fibra puede ayudar a mantener la piel saludable. Además, se ha demostrado que los antioxidantes en alimentos como el tomate y las frutas protegen la piel de daños solares.
Otros expertos sugieren que reducir el consumo de alimentos azucarados y almidonados puede ayudar a mitigar el acné. También se ha vinculado el consumo de lácteos y proteína de suero con un acné más severo.
Si bien algunas dietas en específico, como la dieta mediterránea, se han asociado con mejoras en la psoriasis, no existe una fórmula única para tratar problemas de piel a través de la alimentación. Ploch recomienda obtener nutrientes de los alimentos en lugar de suplementos, puesto que estos pueden no estar bien regulados y causar efectos no deseados.
Agregó que es fundamental mantener una dieta equilibrada y variada para asegurar que se obtengan todos los nutrientes necesarios.
Alimentos que favorecen y deterioran la salud de la piel
Según Rajani Katta, dermatóloga y profesora clínica en la Escuela de Medicina de Baylor, es difícil conocer exactamente cómo la alimentación afecta la salud de la piel, pero algunas investigaciones arrojaron pistas.
Un estudio publicado en 2019 puso de manifiesto la estrecha relación entre la alimentación y la salud de la piel. La dermatóloga Lauren Ploch subraya que la piel, siendo un órgano vital, depende en gran medida de los nutrientes que consumimos para mantenerse saludable y funcionar de manera óptima.
Uno de los ejemplos más notables de cómo la dieta impacta en la piel es el papel de la proteína en la producción de colágeno, una proteína esencial para mantener la piel firme y ayudar en la cicatrización de heridas. Asimismo, los antioxidantes, como las vitaminas C y E, ofrecen protección a la piel contra los daños provocados por factores ambientales como la contaminación del aire y la radiación solar.
Si bien es innegable que nuestra alimentación influye en nuestra salud cutánea, la pregunta es si algunos alimentos específicos pueden contribuir a una piel radiante o, por el contrario, empeorar problemas como el acné, como se sugiere en videos de TikTok.
Investigaciones científicas han proporcionado algunas respuestas a estas cuestiones. En primer lugar, se ha demostrado que ciertas deficiencias nutricionales pueden causar problemas evidentes en la piel. Por ejemplo, la falta de vitamina C puede llevar a la aparición de síntomas como hematomas, cicatrización deficiente y piel áspera.
¿Cómo afecta la alimentación a la piel a largo plazo?
No obstante, estas deficiencias nutricionales son poco comunes en países como Estados Unidos. A pesar de esto, hay investigaciones que sugieren de manera más sutil cómo la dieta puede influir en la salud de la piel. En un estudio realizado en los Países Bajos en 2019, se observó que las personas que consumían una dieta rica en frutas, verduras, pescado y alimentos ricos en fibra tendían a mostrar menos arrugas que aquellos que consumían más carne roja y alimentos procesados.
Otro estudio en Francia relacionó la dieta mediterránea con un menor riesgo de desarrollar cáncer de piel, gracias a los efectos antioxidantes y los que desinflaman de esta dieta.
A pesar de estas pistas, la relación entre la alimentación y la piel sigue siendo un área de investigación en desarrollo. Algunos estudios a menor escala han descubierto que ciertos alimentos, como la pasta de tomate rica en licopeno, pueden proteger la piel del daño solar. Además, los compuestos presentes en alimentos como frutas y verduras coloridas, té, chocolate amargo y diversas hierbas y especias pueden ofrecer beneficios similares.
Aunque existen pruebas de que reducir el consumo de alimentos azucarados y almidonados puede ayudar a mitigar el acné, el efecto de la dieta en condiciones cutáneas varía de persona a persona. En general, los cambios en la alimentación pueden complementar, pero rara vez reemplazar, el tratamiento médico necesario.
Recomendaciones de los expertos
Para mantener una piel saludable, los expertos recomiendan seguir una dieta equilibrada, obteniendo nutrientes de los alimentos en lugar de recurrir a suplementos. Por ejemplo, la dieta mediterránea se destaca como una opción beneficiosa debido a su aporte de antioxidantes y compuestos vegetales.
Es importante destacar que no hay una fórmula única para abordar problemas de piel a través de la alimentación, y que la atención médica adecuada es esencial para tratar cualquier afección cutánea.
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