En la actualidad pocos conocen quien era Curly, el gordo de Los Tres Chiflados; pero este es uno de los personajes que más hizo reír por aquellos años 30; y aún ya que en algunos países transmiten la serie.
El cómico siempre quiso hacer series, películas y teatro, tenía un estilo muy particular de hacer reír; por sus muecas y su manera de actual junto a Larry y Moe. Pero en el fondo todo ese buen humor no mostraba quien era en realidad.
Quería ser famoso y destacar en esa serie por allá en los años 30 cuando la televisión a blanco y negro mandaba. Desde niño quiso ser ese actor de cine cómico, de esa esencia verdadera que era la comicidad. Era muy débil ante las mujeres y se le conocieron muchos romances en aquellos años.
La primera condición para entrar al programa de Los Tres Chiflados era raparse el cabello y afeitarse el bigote; aceptó aunque sabía que eso no lo iba a mostrar como un galán ante las mujeres. Pero su papel caló en la televisión norteamericana.
Curly, hasta allí todo iba bien
Todo iba bien allí pero el desmedido afán por la comida y la bebida hizo que la obesidad llegara; sus amigos Larry y Moe, interpretados por Larry Fine y Moe Howard le pedían que llevara una vida tranquila; que pensara en su carrera.
Pero el cómico se hizo fanático de las mujeres, los coches, las mascotas y la comida; gastando mucho más de lo que ganaba. Se casó por primera vez en 1932 con Julia Rosenthal pero la unión matrimonial duró seis meses.
Cinco años después se casó por segunda vez con Elaine Ackerman con la cual duró tres años casado; y tuvieron una hija. Para 1940 decidió unirse a Marion Buxbaum; sintió un amor desenfrenado por ella pero ese fugaz matrimonio duró tres meses.
Marion le llevó a juicio y esa unión fue muy tóxica para el cómico quien enseguida comenzó a presentar una salud debilitada. En mayo de 1946 en uno de los rodajes de Los Tres Chiflados sufrió el primer ACV. Sin pensarlo esa sería la última vez que actuaría en la famosa serie como Curly.
Vida lamentable
Ya el cómico comenzaba a sentir la secuela de la obesidad, glicemia y tensión alta; no pudo seguir en televisión. Un año después deciden invitarlo para que participe en uno de los capítulos en 194; su hermano Shemp había entrado a Los Tres Chiflados.
Decidió el cómico en ese tiempo rehacer su vida con Valerie Newman; quien lo cuidó y tuvieron una hija. Pero la falta de dinero era evidente en él, ya no era aquel personaje bonachón; a pesar de estar con 44 años.
Los actores que interpretaban Los Tres Chiflados decidieron darle una parte de salario para que pudiera mantenerse. En 1948 el cómico que actuaba también con papeles cortos en películas sufría su segundo ACV.
Para el año 1951 el cómico sufría su tercer derrame cada vez más fuertes; de hecho lo querían internar en una clínica para enfermos mentales; pero sus compañeros Larry y Moe se negaron; esperaban que tuviera una vida más tranquila pero no pasó así.
La muerte
El 18 de enero de 1952 sufrió el cuarto ACV que lo dejó sin vida; su hermano Shemp lo encontró muerto. Murió sin dinero y con muchos problemas encima a la edad de 48 años; se encuentra sepultado en el Home of Peace Cemetery de Los Ángeles.
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