El Vaticano informó el pasado jueves que el papa Francisco no realizará la tradicional visita al Portal de Belén y el árbol de Navidad instalados en la Plaza de San Pedro, para evitar aglomeraciones que puedan suscitar contagios.
Papa Francisco canceló la visita de nochevieja
Francisco celebrará mañana, viernes, la misa de final de año, y la tradición establece que a su término el papa acude a visitar el árbol y el Portal de Belén, donde le suelen esperar numerosos fieles y curiosos, a los que saluda, y también medios de comunicación. «El evento no tendrá lugar para evitar aglomeraciones y el riesgo de contagios por coronavirus», explicó la Oficina de Prensa del Vaticano.
Francisco, de 85 años, celebró el miércoles su audiencia general semanal como es habitual en el aula Pablo VI del Vaticano, con mascarillas y distanciamiento social. Como todos los países de Europa, Italia -y por extensión el pequeño Estado de la Ciudad del Vaticano- se enfrenta a un aumento de los casos. Italia registró esta jornada más de 126.000 contagios, récord total desde el comienzo de la pandemia.
El año pasado también se canceló
La víspera de Navidad, sin embargo, sí conmemoró la Misa del Gallo ante unos 1.500 fieles. El año pasado, esa misma celebración se realizó en un formato reducido, precisamente debido a las medidas de restricción impuestas por las autoridades para controlar el avance de la pandemia. El año pasado, Jorge Mario Bergoglio no presidió la misa de fin de año, ni tampoco la del 1 de enero de 2021, por un problema de ciática.
En esta ocasión, el pesebre instalado en la Plaza de San Pedro procede de Perú y está formado por 35 piezas a escala real representativas de la comunidad campesina de Chopcca, de la céntrica región andina de Huancavelica. Las figuras están elaboradas en cerámica, maguey (agave) y fibra de vidrio, con coloridas prendas tradicionales de Chopcca, declarada en 2014 como patrimonio cultural de la nación por su originalidad e importancia dentro de la cultura andina, reseña la DW.
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