Hace un año, Elon Musk adquirió Twitter por 44 mil millones de dólares con la intención de liberarla de lo que él consideraba un «virus mental woke».
Este restringía la libertad de expresión. Sin embargo, las perspectivas de negocio del sitio no parecen prometedoras.
Según datos no publicados, previamente obtenidos por The Washington Post, el número de personas que tuitean activamente en la plataforma ha disminuido en más del 30%.
Además, la compañía, rebautizada como «X» por Elon Musk, está enfrentando la pérdida de anunciantes y de ingresos. Parece que Musk ha cumplido su promesa de hacer que Twitter sea mucho menos «woke».
Un cambio político notorio
El magnate ha llevado a Twitter en una dirección explícitamente política. Ha apoyado públicamente a figuras políticas conservadoras y ha reforzado la presencia de la derecha en la plataforma.
Organizadores de diferentes espectros políticos han notado el cambio hacia la derecha en Twitter, especialmente en Estados Unidos.
X se ha convertido en un lugar donde abunda la desinformación y los informes confusos, según una investigación de la Universidad de Washington.
En medio del conflicto entre Israel y Gaza, Twitter fue fundamental para difundir noticias no contrastadas.
NewsGuard, una organización sin ánimo de lucro que supervisa la credibilidad de los medios, descubrió que X era uno de los principales proveedores de desinformación durante el conflicto.
El enfoque de Elon Musk
Elon Musk ha intensificado su enfoque en la plataforma al modificar las políticas de verificación de cuentas y al cambiar el algoritmo para priorizar los tuits de suscriptores de pago, muchos de los cuales son conservadores influyentes.
El magnate ha abogado por que sus seguidores confíen en los «periodistas ciudadanos» que publican en X en lugar de en las organizaciones de noticias profesionales.
Esto tiende a facilitar la proliferación de fake news y datos no verificados en la web.
Preocupaciones sobre el futuro de Twitter
A pesar de la influencia de Musk en Twitter, ha generado preocupaciones sobre el futuro de la plataforma y su atractivo.
La plataforma se ha inclinado hacia la derecha, y la manipulación de la visibilidad de los tuits en función del pago ha desencadenado un cambio en la misma.
El declive de Twitter ha llevado a la creación de competidores, como Threads de Meta y Mastodon. Sin embargo, ninguno ha logrado reemplazar el papel fundamental que Twitter tenía en el debate mundial.
El dilema de Elon Musk
Musk no siempre fue tan partidista, pero su desencanto con la izquierda y sus creencias personales han influido en el rumbo de Twitter.
Ahora, la red social se enfrenta a una serie de desafíos, incluida la pérdida de usuarios y anunciantes.
El multimillonario ha mantenido Twitter como una plataforma en constante evolución. El futuro de la misma y su influencia en el mundo de las redes sociales aún está por verse, pero las implicaciones de estos cambios son evidentes.
La controversia y la incertidumbre rodean el futuro incierto de la plataforma bajo el liderazgo de Elon Musk.
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