Eran tiempos pasados cuando Tigres de Detroit por este tiempo se veía cómodo en el primer lugar; ahora todo ha cambiado. El pitcheo y la ofensiva no le han salido bien a los bengalíes esta campaña y están lejos de clasificar.
El mánager Ron Gardenhire trata de hacer milagros y buscar superar las cuarenta victorias. Por ahora el club de la ciudad de los motores, tiene foja de 30 triunfos por 65 reveses.
Uno de los peores récords que hay en la Liga Americana; a pesar de que Marineros y Orioles también están últimos.
No todo ha salido bien
Desde principio de campaña, Tigres de Detroit presentó problemas con el pitcheo; tanto el pitcheo abridor como relevista presentaron fallas. Los Tigres de Detroit no era el equipo sobresaliente y compacto.
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No era aquel equipo que buscaba la manera de ganar los juegos; a Ron Gardenhire como mánager se le escapó de las manos el asunto. No todo le salió bien a los felinos que perdió encuentros por mínimas carreras.
La falta de ofensiva también ha sido un golpe duro para el equipo que en la Liga Americana; y ahora está casi fuera.
Pensar en la próxima zafra
Tigres de Detroit deberá de montarse en el mercado e invertir en buenos serpentineros; si quiere avanzar y poder estar en los primeros lugares. Pensaron más en lo que podían hacer sus muchachos jóvenes.
Una falta que ha tenido siempre Detroit es la falta de un brazo que cierre los juegos; esa falla la vienen presentando desde hace cerca de una década.
El bateo ha sido negativo sobre todo Miguel Cabrera que no es el mismo jugador de hace unos años. Cabrera era el pilar ofensivo de los Tigres de Detroit y sin duda su ofensiva ha bajado.
